Bruselas quiere que todos los embalajes de la UE sean reciclables para 2030
La Comisión Europea propone nuevas medidas para reducir el exceso de empaquetado y envases, como la obligación de servir los cafés para llevar en vasos reutilizables en 18 años.
¿Cuántos envoltorios hay que abrir, y luego tirar, cada vez que se adquiere un producto, desde alimentos en el supermercado a comida a domicilio o, sobre todo, cuando compramos por internet? Bruselas ha hecho sus cálculos: cada año, cada europeo genera casi 180 kilos de desechos de embalaje. Que suman casi 80 millones de toneladas entre todos. Y esta basura altamente evitable aumentará hasta los 215 kilos anuales por persona en 2030, si no se pone freno a esta tendencia. Hace poco más de un año, ya entró en vigor la prohibición de productos como pajitas, platos y cubiertos de plástico de un solo uso. Ahora, la Comisión Europea quiere dar un nuevo paso en su transición hacia una economía circular con una propuesta para reducir drásticamente el exceso de embalaje e impulsar las opciones de envases reutilizables o recargables.
Uno de los principales objetivos definidos este miércoles es lograr que todos los embalajes de productos vendidos en los Veintisiete sean reciclables y, a la vez, “económicamente viables” para 2030 y que, para 2040, se logre reducir en general los desechos de embalaje un 37%.
“Hoy damos un paso más poniendo a todo el sector de los embalajes en la vía hacia la circularidad”, ha celebrado al presentar la propuesta en Bruselas el vicepresidente de la Comisión y responsable para el Pacto Verde Europeo, Frans Timmermans. Se trata tanto de impulsar el reciclaje y el uso de materiales reciclados en el embalaje como la reutilización de envases, dos conceptos, reutilización y reciclaje, que no son antagonistas sino combinables y hasta complementarios, ha dicho por su parte el comisario de Medio Ambiente, Virginijus Sinkevicius, para quien “hace falta un cambio en el sistema”.
Entre las medidas que propone el Ejecutivo europeo figura “impulsar” el uso de envases reutilizables o recargables en el comercio al por menor, que en las últimas dos décadas ha sufrido una caída vertiginosa. Para ello, las empresas deberán ofrecer, de manera obligatoria, un cierto porcentaje de sus productos en envases reutilizables o recargables, por ejemplo bebidas para llevar. “Para 2040, la mayoría de los cafés para llevar tendrán que ser puestos en vasos reutilizables o en tazas que traigamos”, ha señalado Timmermans al respecto. Los envases además deberán ser “fáciles de reciclar” y estar elaborados con el mayor porcentaje posible de material reciclado.
Además, se prohibirán ciertos tipos de envases, por ejemplo los de uso único para alimentos y bebidas consumidas en el interior de restaurantes o cafés, así como el envoltorio en plástico de frutas y verduras, o envases de miniatura para champús y otros productos en hoteles. Habrá porcentajes obligatorios de material reciclado que los productores deberán incluir en embalajes nuevos de plástico.
Bruselas también quiere aclarar la confusión que muchos consumidores sienten a la hora de tirar sus desechos en los distintos cubos de basura que la mayoría de países estipulan.“ Todos hemos recibido productos comprados en línea y que llegan en cajas demasiado grandes. Y a menudo nos hemos preguntado cómo separar la basura para reciclar, qué hacer con una bolsa biodegradable o si todo el embalaje que tiramos va a volver a ser usado o transformado al menos en algo nuevo”, resumió Sinkevicius.
Una iniciativa que además creará “nuevas oportunidades de negocio en la transición verde y digital”, agregó Sinkevicius, así como más puestos de trabajo en el sector —más de 600.000 empleos para 2030— y más dinero en el bolsillo de los europeos: la Comisión calcula que, si las empresas trasladan los ahorros que lograrán con la reutilización de embalajes al consumidor, este podría ahorrar hasta 100 euros anuales.
*Fuente: elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2022-11-30/bruselas-quiere-que-todos-los-embalajes-de-la-ue-sean-reciclables-para-2030.html